Al implementar estas siete técnicas comprobadas, puedes reducir tu ansiedad y recuperar un sentido de equilibrio y bienestar. Recuerda que el cambio lleva tiempo y que el progreso puede ser gradual.
Mantén un diario de emociones. Escribir sobre tus pensamientos y sentimientos puede ofrecerte claridad. Dedica unos minutos cada día para reflexionar sobre lo que sientes.
FAIRMONT, Minnesota — Sentir de vez en cuando ansiedad es una parte ordinary de la vida, pero las personas con trastornos de ansiedad experimentan sentimientos frecuentes y excesivos de ansiedad, miedo, temor y pánico en situaciones cotidianas.
“Es posible que sus preocupaciones no desaparezcan por sí solas y empeoren con el tiempo si no busca ayuda”, señala Kabrick.
Crea una rutina diaria: La estabilidad y la estructura ayudan a reducir la sensación de descontrol.
Es decir, desviar la atención y centrarte en otra cosa en vez de concentrarte en las sensaciones corporales que estás experimentando
La vida está llena de cosas y situaciones que disparan la ansiedad y el estrés, que nos alteran y nos descontrolan, y ese descontrol hace que las cosas parezcan más grandes de lo que son realmente, o que sea mucho más difícil encontrar buenas soluciones.
El ejercicio físico regular es essential para controlar la ansiedad. Actividades como caminar, correr o practicar yoga liberan endorfinas, que actúan como antidepresivos naturales. Encuentra una actividad que disfrutes y establece un horario:
Empieza reconociendo las distorsiones cognitivas comunes, como el pensamiento catastrófico, el pensamiento en blanco y negro y la generalización excesiva. El siguiente paso es reformular estos pensamientos considerando explicaciones alternativas como calmar la ansiedad y centrándote en pruebas que contradigan tus suposiciones iniciales.
Vuelve a tus tareas: Tan pronto como puedas vuelve a lo que estabas haciendo y continúa con lo que 10ías planeado. Ante un ataque de ansiedad puede ser útil recordarte a ti mismo qué aporta esta actividad a tu vida y por qué es importante motivarte para seguir adelante.
Un sueño deficiente puede agravar la ansiedad. Establecer una rutina de sueño consistente puede ayudar a mejorar la calidad del sueño y reducir los niveles de ansiedad. Para promover un sueño reparador, establece una hora common de acostarte y despertarte, crea una rutina relajante antes de dormir, asegúprice de que tu entorno de sueño sea cómodo y propicio para el descanso y limita la exposición a pantallas y actividades estimulantes antes de dormir.
Recuerda que cada persona es única, por lo que es importante encontrar las técnicas que funcionen mejor para ti y adaptarlas a tus necesidades y preferencias.
Crear planes de acción: Desarrolla pasos personalizados para afrontar los ataques de ansiedad de manera efectiva.
¿Alguna vez has sentido una inquietud inexplicable que no te deja disfrutar del momento? ¿Has notado cómo una simple preocupación puede convertirse en una sensación de ansiedad que no parece tener fin?